Sin duda, eres lo que más amo en este mundo. Sé que siempre estaras a mi lado, pase lo que pase. Nunca me decepsionaras, y sé que eres tú en la única persona que puedo confiar. Te quiero. Porque siempre estas ahí para todo lo que necesito. Eres tú quien me ayuda a solucionar todos mis problemas, quien esta las 24 horas del día pendiente a mí, quien daría la vida por mí y nunca se arrepentiría de ello, quien me entiende con una simple mirada. Esa eres tú. No sé como agradecerte todo lo que has echo por mí estos 13 años. Gracias; gracias por quererme, cuidarme, por cada día a tu lado, por cada sonrisa, por cada enfado, por hacerme feliz en los momentos más tristes de mi vida, por decirme te quiero cuando más lo necesitaba. Gracias por todo, sobre todo gracias por ser tú. Eres lo mejor que me ha pasado en la vida, eres lo único que necesito para vivir. Eres mi felicidad personificada.
Eres la madre perfecta, la que toda hija desearía tener.
Y lo siento por todas las veces que te he hecho enfadar, por todas esas niñerías. Lo siento. No quiero perderte, porque ahora mismo eso es lo que más me asusta, porque no sé lo que haría sin ti. Porque tú eres mi razón de vivir. Porque lo eres absolutamente todo para mí.
¡Te quiero mucho mami!
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