lunes, 28 de noviembre de 2011

~ Parece que te empeñas en que te odie. Y cuanto más te odio, más me enamoro de ti.

Sonríes pero en realidad no estás feliz. Preguntas pero realmente no quieres saberlo. Hablas pero realmente no tienes nada que decir. Te ríes pero no lo encuentras gracioso. Lloras pero en realidad no significa nada. Te levantas pero realmente no estás despierto. Duermes pero en realidad no estás descansando. Estás vivo... pero realmente no estás viviendo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario